Hasta finales de junio pueden ver en La Conservera de Ceutí lo ultimo de lo ultimo en arte de vanguardia.
Me gusta mas esta expresión que arte contemporáneo porque lo contemporáneo es lo actual y en la mayoría de los casos el arte actual no es arte de vanguardia.
Me comentaba la joven y atenta guia que La Conservera no es un museo porque no compra ni colecciona obras.
Experimenta y encarga.
Y la mayoría de lo que vemos desaparece al finalizar las exposiciones con lo que somos testigos de algo irrepetible que tiene fecha de caducidad artística.
Cuando asistimos a un concierto de música culta estamos ante la misma situación.
La partitura aunque la interprete el mismo grupo o solista en el mismo auditorio no suena igual porque es como una arroz que aunque estemos hartos de hacerlo de igual manera nunca nos sale igual porque cada acto creativo es diferente como cuando hacemos el amor que nunca es igual el acto sexual porque cuando es igual al anterior ya no estamos haciendo el amor sino que esta sublime expresión de la relación humana se ha cosificado y se ha robotizado y ya no es lo mismo.
Ya no es el arte de amar de mi admirado Erich Fromm. Es fornicar. Aparearse. Es una rutina fatigosa y alienante.
Ese carácter temporal finito e irrepetible de lo que se expone en La Conservera me seduce mucho.
Otro factor es la óptima relación que hasta la fecha establezco con las chicas guias que me orientan y explican el porque de lo que exponen los artistas en este espacio tan peculiar que viene dado porque previamente a la creación de sus obras estos artistas contratados vienen y ven la sala o las salas que les han correspondido y en función del tamaño y de la luz diseñan lo que entienden pueden diseñar.
Es por lo tanto una arte instrumental y utilitario el que vemos en La Conservera y por lo tanto con sentido.
La gran sala de La Conservera se convierte como ven arriba en una guardería gigantesca a lo Agatha Ruiz de la Prada artista que tanto me gusta y admiro y a la que podían invitar a exponer en La Conservera.
Decenas de estudiantes de Bellas Artes siguiendo las instrucciones de la artista han pintado de flores las paredes y el suelo.
Entramos descalzos o con unas babuchas que nos facilitan.
La paz se adueña de nosotros.
Y la infancia y la ingenuidad en una obra plenamente mironiana.
Por la tarde y antes de cerrar de 20h 30 a 21h aprovechando una chimenea que se conserva de la antigua fabrica sobre la que se levanta La Conservera una de las artistas ha ideado un montaje visual con humo que tengo pendiente de ver.
La Conservera ya esta considerada el segundo museo o centro de arte contemporáneo de España.
El Macba que es el primero no tiene nada que ver con La Conservera.
Me quedo con La Conservera.
No me gustan los museos grandes institucionales. Ni los arquitectos que los hacen.
Deben existir pero yo voy lo mínimo a ellos. Prefiero los pequeños centros de arte y museos porque además son mejores con diferencia a los mastodontes que son super de arte.
Enhorabuena a la Comunidad de Murcia. La Conservera es una gran Centro de Arte. De los mejores que conozco en España.
Buenos gestores, medios y ganas y el éxito artístico esta asegurado.
Hellín a 19 de Abril de 2.010.
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