En 1.976 Brian de Palma da el pelotazo de su vida con Carrie.
Un brutal éxito de taquilla y de critica lo que es difícil y meritorio ¡Quien no saltó ante esa mano que sale de la tumba!
Los psiquicos.
Adolescentes que tienen poderes para normales y que cuando se cabrean la lían y gorda.
La Furia que rueda dos años mas tarde se conserva bien.
Por esa atmósfera tan conseguida de cine casi negro.
Porque Kirk Douglas esta hecho un toro y John Cassavetes es el demonio encarnado.
La secuencia final es antológica con esa cabeza que flota en un ballet de despojos humanos.
El gran John Williams aparece como firmante de una banda musical inquietante con un clarinete o varios que son obsesivos y muy eficaces.
En esa década me interesaba mucho la parapsicologia.
Por un buen amigo posterior la aborrecí.
Pero reconozco que da mucho de si la temática del mas allá en el cine.
Y esas facultades extra sensoriales que dicen tener algunos y que puede que tengan pero sin llegar nunca a las sangrientas carnicerías que montan los imberbes protagonistas de estos peliculones que tanto me gustan.
Hellín a 8 de Enero de 2.010.
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