Estas casi tres horas de buen cine me siguen gustando y mucho.
Brian De Palma tiene talento y planifica de manera concienzuda sus largas secuencias.
La del martirio del cubano a manos de los colombianos con el motosierra es paradigmática del buen hacer de este director al que tanto le gustan las grúas.
En el uso de estas parece tener mas influencia de Orson Welles que de su idolatrado "Hitch".
Tal vez la fabulosa Sed de mal se encuentre en no pocos momentos de este remake que es Scarface pero que no tiene nada que ver con el peliculón de Howard Hawks a quien esta dedicada.
Desde luego el polifacético y discreto y genial Howard Hawks esta a años luz de Brian de Palma.
En 1.932 Hawks rodó Scarface y 51 años después De Palma esta notable El precio del poder.
Es que hay realizadores cinematográficos que les gusta mover la cámara y eso esta bien.
Y en cambio otros apenas la mueven y eso esta casi mejor.
Sigo pensando que los grandes maestros del cinema son irrepetibles y que te puede salir en una generación un Clint Eastwood pero con mucha suerte.
En el fondo lo que tienen los clásicos es que su obra esta llena de filosofía y de humanismo y nos hacen mejores y no peores. Hasta Buñuel a pesar de su evidente crueldad es humano. A su peculiar manera pero humano como lo es Goya.
El cine de Brian de Palma es calvinista y desesperado. Nos habla del mal del hombre y de que es un mero animal que come, fornica, defeca, se droga y vuelta a empezar.
Están llenos su filmes de tarados como este Tony Montana.
Un psicópata. Un irrecuperable que no merece estar en la calle. Un asesino demente que se quiere acostar con su hermana si es que no lo hizo ya. Esnifa y esnifa coca. Es un monstruo.
Al Pacino muy bien. Zafio, borde, chulo y criminal. Su mirada perdida llena de odio y locura antológica.
10 después en 1.993 en Atrapado por su pasado hará el papel de su vida. Mas sobrio porque también el papel lo exigía.
El mejor que le he visto de momento.
La banda de Moroder pues Moroder.
Le pega tan mediocre música al vulgarisimo y analfabeto paleto gangster cubano.
Que tendrá la revolución castrista que genera estas excrecencias sociales tan patológicas.
La megalomanía de nuestro mafioso es la que tiene todo dirigente comunista que se precie que llegue al poder democráticamente o no.
Salvadores de los suyos no toleran la critica y exterminan al menos pintado con tal de seguir eternamente en el poder.
Un 7 raspado para este Scarface que no es Scarface.
Hellín a 23 de Enero de 2.010.
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