De verdad estas dos horas que pasa uno viendo como se destruye este cantante de country son inolvidables.
Comentaba ayer que Eastwood es el Ford actual.
Quien haya visto Las uvas de la ira no puede dejar de recordarla mientras visiona El aventurero de medianoche.
John McIntire es un secundario de lujo que hace de abuelo del adolescente Kyle Eastwood que se convierte en el perro lazarillo chofer de un esplendido Clint Eastwood como actor que en el fondo siempre me ha parecido un músico metido al cine.
Un músico sensible que firma temas de sus películas.
Como realizador el de San Francisco es extraordinario.
Cuida al máximo todas sus tomas y secuencias.
Sabe que el cinema debe entretener porque si no entretiene fracasa una cinta.
Esta que comentamos no fue bien en taquilla pero lo compenso luego al año siguiente con Impacto súbito un magnifico Harry que dirigió el mismo.
Así es la industria de cine americana.
Las películas deben dar dinero porque de lo contrario la industria desaparece porque el cine es arte si pero ante todo industria.
Clint Eastwood jugaba con ventaja.
Siempre tenia un Harry en la recamara que ofrecer a los agarrados y tacaños productores.
Hellín a 4 de Febrero de 2.010.
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