Es un triple CD que me ameniza a menudo mis calvinistas guisos de single. De los primeros estuches que me compre en Barcelona.
El instante en que aparece la llamada diva nazi prusiana la hiperbólica Elisabeth Schwarzkopf me quedo abduccido/hipnotizado por esta soprano genial y dejo todo lo que tenga entre manos en este caso un soberbio conejo que uno esta haciendo con ajos de Las Pedroñeras los mejores del mundo por cierto y con ese picual excepcional de la Cooperativa San Joaquín de Agramon .
"Ah, fuggi il traditor...." es uno de los momentos mas grandiosos de la historia de la ópera en la prodigiosa garganta de la Schwarzkopf. Yo no se si definir a este ángel que tuvo la vida que tuvo como una soprano de coloratura pero si que es cierto que a muy pocas sopranos -solo a la divina Joan Sutherland- en mi vida he escuchado cantar con tanta intensidad, ornamentación, pureza, entrega y belleza.
37 años tenia en 1.953 Elisabeth Schwarzkopf. Estaba en su plenitud y madurez artística y vocal cuando actuó bajo las ordenes del fabuloso Wilhelm Furtwängler
Considerada una cantante obsesiva perfeccionista estilista doy fe de que lo fue.
Para mi la ópera tiene hueco en mi vida mas cotidiana y domestica.
Me gusta casi mas escucharla que verla.
A mi bola.
Saltándome escenas y volviendo a oír lo que me gusta mas una y otra vez.
En este caso con un mandilon de esos que me hace mi santa madre para cocinar que por cierto me acaba de llamar para variar mientras estaba acabando de darle el toque a una carne que les recomiendo que aunque no sea barata es sana y sabrosa y riquisima.
Hellín a 4 de Abril de 2.011.
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