En el número de este mes de la formidable Scherzo un articulo sobre Petrushka de Igor Stravinsky por su centenario.
Este mítico ballet a los pocos años de su estreno en París en 1.911 llego a Madrid y hubo su buena polémica.
Manuel de Falla defendio a su amigo Igor que era tachado de demasiado audaz y moderno por los críticos musicales mas conservadores del momento.
Quedaba por llegar en 1.913 el estreno de la obra cumbre sinfónica del siglo XX que fue y es La consagración de la primavera y que la lió pero bien liada. Menuda se organizo. Se dice que hubo puñetazos y todo entre los detractores y los defensores de esta increíble composición salvaje que todavía nos asombra cuando la escuchamos.
Stravinsky es el gran genio de la música del siglo XX como lo es Picasso en la pintura.
A mi me gustan mas Bartok y Miró respectivamente porque los veo artistas mas humanos y porque me llegan mas hondo pero debo reconocer que sí que el fabuloso y complicado Igor fue y es el compositor mas influyente e importante y carismático de su época.
Su música que es variada y amplia esta llena de ritmo y de color.
No es tan cerebral como se dice pero nos sobrepasa.
Por lo menos a mi me cuesta y mucho con Stravinsky concentrarme en su densa música.
Me altera y me pone nervioso. A veces me irrita.
Lo aprecio pero no tanto como a Bartok y me llega mucho menos que Shostakovich compositor por cierto también difícil y mucho mas aspero y duro que su compatriota pero menos racional y perfecto y por eso mucho mas doloroso e intenso.
Hellín a 8 de Febrero de 2.011.
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