miércoles, 7 de octubre de 2009

EL MERCADO DE COLON DE VALENCIA JOYA DEL MODERNISMO QUE AHORA ES USADO PARA OCIO Y COMPRA DE LIBROS Y PLANTAS. TIENE UN REFINADO RESTAURANTE. BELLO





Mercado de Colón
El Mercado de Colón es un antiguo mercado ubicado en la ciudad de Valencia, hoy rehabilitado y dotado de comercios y establecimientos dedicados a la hostelería. Se destinó a cubrir las crecientes necesidades del Ensanche de Valencia, dominado por la clase burguesa. El edifico, fue concebido y realizado por el arquitecto Francisco Mora Berenguer entre los años 1914 y 1916. Es un claro ejemplo de arquitectura modernista de principios de siglo. Está declarado además como Monumento Nacional.
Su emplazamiento limita con las calles Conde de Salvatierra, Jorge Juan, Martínez Ferrando y Cirilo Amorós de la capital del
Turia. El edificio consta de tres naves: una principal de 18 metros y dos laterales de 7'7 metros cada una, así como de una estructura metálica bellamente trabajada. Consta, por otra parte, de dos fachadas principales y dos laterales sencillas y transparentes, éstas con la estructura a la vista. En cuanto a las fachadas principales, la que recae a la calle Jorge Juan muestra por completo el gusto y tendencias regionalistas que refleja la ideología de una sociedad burguesa valenciana en auge en la época. Se nota en su construcción y decoración la influencia de Antoni Gaudí y de Lluís Domènech i Montaner, maestros con los que Mora compartió taller.
El mercado fue restaurado por completo durante el año
2003 con un coste superior a los 33 millones de euros. Actualmente incluye comercios, cafeterías, un centro El Corte Inglés e incluso un parking subterráneo.
Un mercado que merece la pena que se acerquen a ver si visitan la hermosa ciudad de Valencia.
Ahora su uso es lúdico y recreativo. Amplia programación cultural y un montón conciertos de jazz.
En su sótano una buena biblioteca de El Cortes Ingles.
Y en su primer piso un restaurante con una exquisita decoración y buenas vistas.
La parte central llena de terrazas para tomarse un café y unos puestos muy llamativos de plantas.
Una sorpresa agradable y enhorabuena por haber recuperado este espacio emblemático y darle otro uso pero conservando y respetando su estructura arquitectónica tan notable y espectacular.
En Hellín los hunos socialistas se han cargado la Plaza de Abastos que tenia unos buenos arcos metálicos y una techumbre de madera de destacable valor.
No respetar el Patrimonio es cosa de salvajes. Un pena pero así estamos en Hellín.
Hellín a 7 de Octubre de 2.009.

No hay comentarios: