Un Sirk menor.
Superior a cualquier película actual salvo raras excepciones o ninguna
75 minutos muy intensos. Una película racial. La tribu de los apaches. Un pueblo aguerrido y cruel.
Pero tratado por el realizador alemán/americano con gran dignidad.
Son mas valientes que los pieles blancos. Mas listos. Mas íntegros. Viven en la Naturaleza mas salvaje y forman parte de ella. No pueden estar en una reserva porque se morirían de pena.
Bellisimos los encuadre de nubes. Todo muy recargado. Muy oscuro. Muy hermosa la notable fotografía porque huye de lo diáfano y de lo cristalino y busca adrede lo tormentoso y hasta diría grecoriano.
Rock Hudson esta esplendido. Lleno de matices. Se enamora de una pequeña y frágil Barbara Rush. Pero prefiere el honor y el deber al amor. Es un calvinista indio. Autentico y puro.
Conclusión si tienes una preparación bestial como Douglas Sirk porque has sido escenógrafo, director de teatro y finalmente realizador haces lo que te propongas y un filme de encargo como es Cochise te sale redondo.
Este año, 1.953, rodara una obra maestra como Magnifica Obsesión.
Su primera cinta con 43 años. Y un clásico con 53.
Cuando le tocaba. Primero se formo en Europa. Huyendo del nazismo recalo en EE.UU. Cuando alcanzó los cincuenta encadeno memorables folletines inmarchitables.
Vivimos tiempos de improvisación. De inmadurez. La experiencia es un grado.
Que mejor para acabar que algo de música.
Una bella canción profunda y triste como son estas dichosas fiestas navideñas -yo ya he cumplido les he colocado el adorno que me han mandado desde BCN los amigos del Palau de la Música por su centenario 1.908-2.008 y mis deseos son sinceros- y Schubert por la Ferrier me viene de coña.
Escuchan el lied. Nunca entenderé como una voz tan grave y ancha puede tener apoyatura y coloratura. Debe ser un milagro de esos que se producen por estas fechas cuando te toca el gordo. Suerte.
Hellín a 19 de Diciembre de 2.008.
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